Disfruté
enormemente del evento que Verema realizó en Palma de Mallorca, el segundo lunes de marzo del 2015. El enclave donde se celebró la
cata es simplemente sensacional, El Castillo de Bellver (del catalán antiguo "Bell
veer" o "bella vista"). Es
una fortificación del siglo XIV de estilo gótico que nació como residencia de reyes pero que el paso del tiempo, lo destinó a ser prisión de, entre otros ilustres, Gaspar Melchor de Jovellanos o Emili Darder. Ahora, ya en otra época, ha hecho que nosotros lo disfrutamos como un lugar privilegiado. El castillo está situado en lo alto de una colina a las afueras de Palma,
desde donde podemos contemplar tanto el mar, como la Sierra de la Tramontana o la propia ciudad de Palma, en definitiva un espectáculo.
una fortificación del siglo XIV de estilo gótico que nació como residencia de reyes pero que el paso del tiempo, lo destinó a ser prisión de, entre otros ilustres, Gaspar Melchor de Jovellanos o Emili Darder. Ahora, ya en otra época, ha hecho que nosotros lo disfrutamos como un lugar privilegiado. El castillo está situado en lo alto de una colina a las afueras de Palma,
desde donde podemos contemplar tanto el mar, como la Sierra de la Tramontana o la propia ciudad de Palma, en definitiva un espectáculo.
El día, como es habitual en esta tierra, nos acompañó. No hizo ni frío ni calor, temperatura perfecta para degustar buenos vinos y disfrutar de la compañía. El lugar, el clima y el ambiente, desembocó en una atmósfera de vino muy agradable. El evento cumplió mis expectativas generadas, tanto por la variedad de los vinos como por la organización, salvo una pega que fue la falta de un lugar donde sirvieran algún tipo de sólido tan necesario en eventos de este tipo. Pero a los numerosos vinoadictos que asistimos no nos amilanó.
Hablando
de vino, que había mucho y bueno, tuve la suerte de probar uno que, por su alto coste, aún no pasara por mis manos pero una vez catado
espero volver a repetir. Hablo de Cirsion de Bodegas Roda de la DOc
Rioja. Realmente la impresión fue fantástica tanto del vino como de
las personas que estaban en su stand, con el director
comercial nacional de la bodega José Raventòs Vilaplana a la cabeza.
Conocía Roda y sobretodo Roda I, este segundo me parece de un gran
nivel, pero nada comparable con Cirsion. El salto de precio está
totalmente justificado por la calidad del vino, aunque dicho sea de paso, alguno de mis amigos son contrarios a esta opinión.
Otros
vinos que me llamaron especialmente la atención fueron Titán de
Bodegas Dominio del Bendito, al frente estaba Antonie Terryn con el que pude comentar de forma muy amena sus vinos, Victorino de Bodegas Teso la Monja,
Dominio de Atauta de Bodegas Dominio de Atauta, Quest de Bodegas
Castell d´Encus, El Puntido de Viñedos de Páganos, Clio de
Bodegas el Nido, y me sorprendieron por su calidad los vinos de
Bodegas Hispano-Suizas y Exopto de bodegas Exopto. También me
gustaría destacar, para el que sea amante de los vinos tintos gallegos, el
Hush de la bodega familiar Coto de Gomariz y ya en blanco su Godello, los
dos de la DO Ribeiro.
Y llegó la noche y con ella el fin de fiesta. La iluminación se dio paso y embelleció aún mas no solo el Castillo, sino también lo vivido. De regreso a casa me fui con la esperanza de que este evento se institucionalice. No se cansen de venir¡¡¡

Fuentes:
https://www.vinissimus.com/es/vinos/tinto/detalle_vino.html?id_vino=cirsi10
http://es.wikipedia.org/wiki/Castillo_de_Bellver